Durante muchos años cada noche nos bombardeaban con anuncios de teletienda sobre fajas que nos darían la tableta de chocolate que tantos han soñado tener. Esas fajas eran el primer producto que usaba la electro estimulación muscular (EMS) y que podía ser accesible a la gente de a pie.
Esas fajas han sido el peor invento del ser humano, una persona sin la formación necesaria para controlar los impulsos eléctricos no debe tener acceso al control de la máquinas de EMS.
Si realmente queremos que nuestros clientes empiecen a disfrutar de las ventajas de la EMS lo que tenemos que hacer es estar bien formado y preparado.
Hay que tener en cuenta que vamos a forzar sus músculos para que se contraigan y que además vamos a estimular las capas más profundas del mismo. Por esto, debemos preguntarle a nuestro cliente antes de cada sesión si han tenido algún problema muscular, fatiga o si tienen alguna patología para que así podamos adaptar las frecuencias de los impulsos a sus necesidades particulares.
También es de vital importancia que durante la sesión estemos en constante comunicación con ellos, necesitamos saber si el esfuerzo está siendo demasiado para ellos o si hay que reducir la intensidad en alguna zona.
Sufrir dolor durante la sesión NO es normal, deben sentir un pequeño cosquilleo por las contracciones eléctricas pero en ningún momento hay que sentir dolor.
Cuando acabemos la sesión no debemos olvidarnos de hacerles estirar sus músculos. Para él, han sido solo 20 o 30 minutos de ejercicio y no le ha parecido de gran dificultad, pero debido a la estimulación que sufren los músculos, es de vital importancia dedicarle unos minutos a los estiramientos, sin dejarnos ninguna parte del cuerpo, antes de volver a la rutina cotidiana.
Si nos olvidamos de hacerles estirar pueden sufrir daño muscular como roturas o micro roturas de fibras musculares lo cual es doloroso y les tendría unas cuantas semanas apartados de la actividad física.
Y por supuesto, debemos fijarnos en la realización del ejercicios. Un ejercicio mal realizado puede dar fruto a molestias musculares o incluso lesiones. Durante el entrenamiento, los entrenadores somos la máxima autoridad.
Desde EMS online apoyamos los entrenamientos supervisados por personal formado.
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